En la primavera de 2012, un pequeño grupo de profesores y funcionarios de universidades públicas y privadas de Cancún, México (Universidad del Caribe, Universidad Tecnológica de Cancún, y Universidad La Salle Cancún), comenzó a realizar reuniones las tardes de sábados cada dos semanas en casa de alguno, para reflexionar y crear una universidad bajo la forma de una cooperativa.
Se planteó desde la primera reunión reflexiva de los fundadores, y se confirmó en todas las siguientes, proyectar varios fundamentos: 1) una universidad social, democrática en lo más profundo del sentido de la palabra 2) un objeto social transformador de la realidad 3) con un método educativo acorde a su misión. A nivel práctico y estratégico, se reconoció la necesidad de obtener el reconocimiento de validez oficial del Estado para reivindicar el proyecto y ampliar el alcance transformador de la sociedad desde una posición simbólica que había que instrumentalizar para permitir el acceso a sectores amplios de la sociedad a educación humanista y reconstructiva del tejido social y la prosperidad comunitaria. Una organización libre, autosustentada y autogestionada para recuperar la verdadera autonomía universitaria de la institución imaginaria original y que gire en torno a la construcción de una nueva sociedad brotada del conocimiento, la solidaridad, y la inteligencia colectiva. Como insignia se eligió para el logotipo de la Unicoop una estilizada flor Pensamiento, símbolo de los librepensadores, con forma de trisquel, el cual es el símbolo supremo de los druidas celtas y que representa el aprendizaje e integra en su equilibrio trinitario el cuerpo, la mente, y el espíritu; el pasado, el presente, y el futuro; la eterna evolución y el crecimiento perpetuo del pensamiento.
El pequeño grupo de unos diez profesores organizó una presentación del proyecto ante colegas que pudieran estar interesados y que tenían un perfil acorde a la visión del proyecto. Se personalizaron alrededor de 80 invitaciones por escrito entregadas por medios electrónicos y en persona. En esta reunión realizada en el edificio del Colegio de Arquitectos de Cancún A.C. en octubre de 2012 estuvieron presentes alrededor de 50 personas. Al finalizar la presentación se realizó la convocatoria para iniciar la asamblea constitutiva de la cooperativa que encarnaría el proyecto.
El nacimiento de la cooperativa que más adelante se llamaría formalmente Universidad Cooperativa de Innovación Comunitaria S.C. de R.L. fue tan democrático como debido ser. La asamblea constitutiva de la Universidad Cooperativa se desarrolló los sábados y domingos de noviembre y diciembre de 2012 y en ella se discutieron y redactaron los estatutos, manuales, y reglamentos. Así mismo se eligieron los consejeros dirigentes y coordinador general (representante legal). En enero de 2013, los 24 socios fundadores aprobaron los documentos y se plasmó como fecha formal de su constitución el 14 de febrero para presentar en el registro público. Curiosamente, sin la intención de que así fuera, esta fecha está relacionada en el calendario gregoriano con la flor del pensamiento.
En seguida se conformaron libremente las comisiones de trabajo, centradas en la formación cooperativa, y captación de nuevos socios y recursos así como difusión, y para las cuestiones administrativas. El diseño de los programas educativos y de licenciatura también siguió un proceso democrático y participativo en el que intervino alrededor de 70 profesores y expertos de los temas manejados que diagnosticaron y diseñaron en torno a las necesidades amplias de la sociedad y para el comunitarismo, y no para las necesidades específicas y deshumanizantes del “Mercado”. Surgió un programa de formación cooperativa y autoformación colectiva; al cabo de estos años también surgieron otros programas de acompañamiento a cooperativas surgidos de la experiencia directa y el intercambio con empresas de economía social de la región, y cinco programas novedosos de licenciatura: 1) Economía solidaria, 2) Desarrollo local y autogestión comunitaria, 3) Seguridad y derechos humanos, 4) Ecotecnologías creativas, y 5) Agroecología y Agrosofía, registrados los derechos de autor correspondientes. Pendiente en el tintero de proyectos permanecen las ingenierías de tecnologías de información y comunicación, derecho y contabilidad enfocados a la economía social solidaria, y por supuesto, pedagogías y educación cooperativa. Estos programas se trabajaron intensamente del 2013 al 2015. Y a partir del 2016 se comenzó a preparar los trámites previos para la solicitud de reconocimiento de validez oficial, pero por avatares de la vida y estampas del surrealismo mexicano, incompatibilidad de los tiempos procesales e impasses burocráticos, se dilataron las proyecciones iniciales y la arribada a las metas planteadas. Para esto contábamos con un contrato de comodato con el colegio Ecab Cancún para utilizar sus instalaciones, pero después de varios años y trabas burocráticas con las instalaciones, hemos decidido lanzar una oferta de programas de estudios a distancia, en línea, “desescolarizada”, para replantear el camino y elaborar una pedagogía más compleja adaptada a los nuevos tiempos y a nuestra filosofía educativa, y llegar a nuestro objeto social desde un nuevo itinerario.
Mientras, los actuales 35 socios cooperativistas hemos realizado seminarios de formación cooperativa, talleres, diplomados, contratos de capacitación, encuentros pedagógicos cooperativos, y consultoría e investigación social aplicada con Observatorio de la Gobernanza A.C., Travel Foundation (Cooperative Group), Cooperativa Much Kaab, Gobierno del Estado de Quintana Roo, Comisión para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (hoy Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas) y el Consejo Quintanarroense de Ciencia y Tecnología.
Actualmente estamos lanzando un programa de Maestría en Economía Social Solidaria, preparando un Postgrado en Pedagogías y Epistemologías Cooperativas, y facilitando diversos talleres en el marco de la red social solidaria Selva, Mar y Comunidad, conformada junto con la Universidad del Caribe, Cooperativa Much Kaab, Cooperativa Mar de las Antillas, el Ayuntamiento de Lázaro Cárdenas, en colaboración con el Instituto Nacional de Economía Social (INAES).